El otro día te soñé. Me levante con una sonrisa en la cara.
"Ella es mi novia, Juana." esas palabras salían de mi boca, la cámara se corría a la cara de ella donde se notaba la timidez pero la alegría.
Volvía a ver mi cara, yo sabia que estaba viendo caras atónitas que alternaban su mirada desde nuestras manos entrelazadas, mi cara, su cara. Hasta que dije : "No van a decir nada? perfecto, nos vamos a mi pieza." y comencé a caminar arrastrado a Juana hacia la habitación, mientras que ella se daba vuelta, les dedicaba una sonrisa a mi familia y hacia el gesto de saludo con la mano, soltando al final un "un gusto conocerlos".
Puerta cerrada, computadora encendida reproduciendo The king is dead but the queen is alive, nuestras sonrisas surgieron al mismo tiempo, y segundos después nuestros labios iban a estar sincronizándose con la música, cantándola a los gritos. Saltando, como bailando, hasta que mi mal equilibro característico, me hace caer sobre ella, tumbando nos en el suelo. De pronto la canción no la escuche mas, y solo podía escuchar lo rápido y agitado que estaba mi corazón. Tan solo una mirada hizo falta para darnos el pie a sincronizar los labios entre ellos, jugar con las lenguas, dejar que las manos hagan un recorrido en el cuerpo de ella. La necesidad de probar su piel, me condujo a su cuello, produciendo que se le encorve la espalda y su cabeza se estire hacia atrás, dejándome todo un espacio excitante para probar.
Era una casa, como si fuera una casa de campo que tiene la familia para ir en vacaciones. Había un cuarto en el medio totalmente iluminado con la luz del sol, y la paz que esta traía. al rededor de esa pieza todo estaba oscuro, y sucio. Había polvo, como si en mucho años nadie hubiera estado en esa casa. Como dos niñas corríamos por toda la casa, simplemente nos corríamos una a la otra, sin sentido, riendo a carcajadas, y casi desnudas. Puedo ver claramente como ella corría delante de mi, en corpiño y jean, y ese tatuaje de su espalda me seducía y me incentivaba a atraparla. Así fue, logre atraparla, rodeé su cuerpo con mis brazos, y sentí como su cuerpo era cual niña juguetona atrapada por su hermano para hacerle cosquillas. Besé su espalda, su hombro mejor dicho, donde estaba ese tatuaje. Las risas se detuvieron de golpe, estaban contenidas por unas amplias sonrisas, y aun nuestros ojos reían. Besé su boca, con una pasión incontenible, el salvajismo surgió de las dos y ella termino prisionera de la complicidad de mi cuerpo y la pared.
Ella se encuentra, arrodillada, sentada sobre sus piernas con la nuca al descubierto por su corte de pelo. Su cabeza estaba agacha, ya no tenia jean ni corpiño, la vista de su espalda al total descubierto me seducía, pero la sensación de felicidad, orgullo, y amor me dejaban paralizada, ahí apoyada en el marco de la puerta con una sonrisa y negando con la cabeza por no poder creer lo que veía, en el buen sentido. Como la luz de ese cuarto hacia contraste en su cuerpo, definitivamente era mas cautivante que su personalidad, y es mucho decir.
Me quedo con el recuerdo de la imagen que me dio mi imaginación, esperando que alguien pueda ocupar ese lugar.
(sé que los sueños tiene significados, pero no logro saber que significa éste, y la manera que me hace sentir recordarlo mucho menos.)
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